Lo positivo de la sobreinformación: patrones y publicidad subliminal.

Teemu Arina, uno de los teóricos más relevantes, en mi opinión, sobre Aprendizaje informal (aprendizaje 3.0), del que hemos hablado aquí en ocasiones, suele sorprendernos con ingeniosas presentaciones e ideas originales, eso tan complicado en los tiempos que corren. Me ha sorprendido hoy tratando el renombrado tema de la sobreinformación en la red.

sobreinformacion, efectos positivos

¿Y si fuese algo positivo? Convertir las Debilidades en Oportunidades es una de mis formas favoritas de innovación:

“La sobrecarga de información es una oportunidad para el reconocimiento de patrones, aumentando nuestra habilidad para reconocer lo que está pasando y nuestras habilidades para responder a ello.

Lo he expresado en múltiples ocasiones ante el argumento de la información basura. Si me permitís la analogía: “No hay información basura sin lector poco formado”, o, lo que es lo mismo: La calidad de la información que realmente procesamos aumenta a la par que nuestra formación, clave en el desarrollo de nuestro sentido crítico para filtrarla. Los niños suelen creerlo todo. Algunos adultos nos confundimos a veces en virtud de cierta ingenuidad o acercamiento positivo (diría que auténtico) a la realidad, que nos hace creer, normalmente, en las buenas intenciones y buen criterio de nuestros pares, pero en general somos más críticos.

“Debemos abordar la sobreinformación en un sentido positivo, basándonos en la metáfora, adoptando una actitud de flujo/percepción más que de colección/consumo.”

Un ejemplo claro está en nuestro acercamiento a los lectores RSS. Su función, la de escanear a través de miles de feeds, leer entradas de distintos servicios descentralizados y estructurar de forma interna (estableciendo conexiones) la sobrecarga informativa.

Tener miles de fuentes que consultar, quizás contribuya a que aumentemos nuestra habilidad para detectar y responder convenientemente ante una realidad cambiante y entornos cada vez más complejos.

La sobreinformación puede, de hecho, si nos exponemos de forma permanente a ella y con una actitud positiva, enriquecernos.

“El aprendizaje lineal, secuencial, intencional, es típico del pasado. Es el aprendizaje no lineal, visual, activo, el aprendizaje o la forma más eficiente de aprender en el futuro.”

Imaginemos la blogosfera como una fotografía digital. Un post sería un pixel. Todo lo que alojamos en nuestro lector de feeds, forma, de hecho, un patrón insconsiente que quizás no sepamos reconocer, pero que está siempre presente. Dicho de otro modo, los lectores RSS expandirían nuestro radio de visión subliminal de la información.

A nivel individual podríamos decir que la sobreinformación sobre fuentes adecuadas puede producir insights importantes en nuestras vidas. Para la empresa, el tema sería importante.

Desde un punto de vista de Knowledge Management, gestionar la sobrecarga informativa sería, ya no limitarla, sinó potenciarla, proporcionando herramientas adecuadas para seguir su flujo, captar de este modo parcialmente inconsciente sus patrones y mejorar así la capacidad de adaptación al entorno de los agentes de conocimiento.

Particularmente, como os comentaba, me parece una visión adaptada a la realidad que vivimos, que complementa las visiones constructivistas y conectivistas del aprendizaje. También sería consecuente con los estudios neurobiológicos, que consideran el papel de nuestro cerebro derecho en los procesos automáticos, insconscientes, creativos, intuitivos, más visuales que textuales de acercarnos a la información. (Os recomiendo, si estáis interesados en el tema de la lateralidad cerebral, el relato de Jill Bolte Taylor, muy ilustrativo al respecto)

Quizás lo que hagamos al acercarnos de este modo a la información es asimilarla en ambos hemisferios, percibirla, reflejarla como nubes de etiquetas, patrones visuales en nuestro inconsciente que ayudarán a contextualizar, conectar, entender, a asimilar lo que realmente decidamos leer.

Os dejo un vídeo que resulta un extremo en publicidad subliminal. Un producto muy, muy complicado que necesita de una campaña subliminal específica que aligere los sentimientos negativos de la población o la familiarice hacia su futura presencia en el mercado. ¿Manipulación? Posiblemente. Pero sin duda ingenioso…

Fuente principal: Subliminal pattern recognition and RSS readers

Artículos recomendados:Más entradas sobre el trabajo de Teemu Arina en El caparazón

Entrada leída 948 veces desde Abril de 2022

¿Te ha gustado? Opciones para compartirlo en redes:

7 comentarios en “Lo positivo de la sobreinformación: patrones y publicidad subliminal.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *